1 Combate los radicales libres
Los radicales libres son los responsables de los daños celulares que terminan derivando en el envejecimiento. La pera, por su riqueza antioxidante, es ideal para proteger a nuestro cuerpo de esta presencia indeseada. Además, una pera contiene el 11% de la vitamina C recomendada por día y posee altos valores de vitamina K.
2 Es buena para el corazón
La pera contiene mucha fibra y esta es indispensable para gozar de una buena salud cardíaca. Esto se debe a que la fibra, al promover la eliminación de sales biliares, reduce los niveles de colesterol "malo". Por otra parte, se ha comprobado que el consumo de peras reducen los riesgos de experimentar un derrame cerebral hasta en un 50%.
3 Previene el cáncer
Ahora bien, la fibra presente en la pera no solo es buena para el corazón; también, ayuda a prevenir el cáncer. Pero, ¿cómo? La fibra ayuda a expulsar los químicos cancerígenos que se acumulan en el colon. De esta manera, protegen a este órgano de sucumbir al cáncer. Además, ciertos estudios han demostrado que comer frutas tan ricas en fibra como la pera reduce en un 34% los riesgos de sufrir cáncer en las mujeres que ya atravesaron la menopausia.
4 Controla la diabetes
La pera tiene un bajo índice de glicemia; esto la convierte en el tentempié ideal para aquellos diabéticos que tengan un antojo de algo dulce. Una vez ingerida, el flujo sanguíneo absorberá muy lentamente los carbohidratos de esta fruta. Esto permitirá controlar los niveles de glucosa.
Estos son los increíbles beneficios de la pera. Incorpora a tus días lo que el escritor Homero calificó, y con razón, como "el regalo de los dioses". No pongas a la pera en es-pera, ¡comienza a disfrutar de sus beneficios ya!